“Arizona Colt”
(1966) es el primer western que rodaron juntos Giuliano Gemma y el director
siciliano Michele Lupo. Antes habían coincidido, en la época peplumita, en
“Maciste, l’eroe più grande del mondo” (1963), y después rodarían unos cuantos
films más, a saber, “”Ben y Charlie” (1972), “Un hombre a respetar” (1972),
“Africa Express” (1974) y “California” (1977).
TRÁILER
El bandido Gordon
Watch (Fernando Sancho) libera a unos presos con la intención de reclutarlos en
su panda. Todos aceptan menos Arizona Colt, que es un pistolero que va por
libre. Según él, “lo debe pensar”. Esto enfurece a Gordon, que trata de matarlo
sin ningún éxito. Mientras Arizona aparece y desaparece mortificando los planes
de Gordon, éste pretende robar un banco en Blackstone City. Uno de sus hombres
(Nello Pazzafini) mata a la hija del dueño de un saloon (Rosalba Neri) porque
ésta le descubre accidentalmente la marca de la banda grabada en un brazo. El
padre de ella (Andrea Bosic) contrata a Arizona para que encuentre al asesino
de su hija a cambio de 500 dólares y de una concesión un tanto especial: pasar
una noche con su otra hija (Corinne Marchand).
Giuliano Gemma en
el esplendor de su carrera westerniana, en plena forma física (saltos varios
a/desde tejados, piruetas en el caballo, volteos de revólver) encarna su
personaje tipo; el caradura solitario, fanfarrón, alegre y simpático. La
picardía o ingenio que lo guía sigue la estela de aquel jovencito saltimbanqui
de “Arrivano i titani” (Duccio Tessari, 1961) que destacaba entre sus hermanos
los titanes por la inteligencia más que por la fuerza, aunque Arizona Colt
también arree puñetazos (el personaje evoluciona). Como ya hiciera Ringo Cara de Ángel, hermano de estos dos, Arizona
torea al jefe mexicano, que también es interpretado por Fernando Sancho, y
tiene su frasecita estelar. Ringo, “es cuestión de principios”; Arizona, “lo
debo pensar”.
Arizona también
se caracteriza por la elegancia en el vestir. Va como un pincel, de azul marino
y chaleco blanco estampado, cuida su imagen, y monta un caballo algo peculiar,
blanco con manchas marrones. En suma, tiene estilo propio.
No había mejor
actor para interpretar al capo de los bandidos que Fernando Sancho. Aparte de
la complicidad en el careo protagonista/antagonista, ya visto en “Una pistola
para Ringo”, Fernando como mexicano gruñón, cruel y mezquino es simplemente
insuperable. También tiene su personalidad. Posee un reloj de cadena cuya
música suena como el tema principal de la película (un detalle muy acertado).
La anécdota que cuenta Gordon sobre cómo heredó el reloj de su padre es una
muestra más de su perversidad. Toma de su antecesor (su personaje de jefe de la
banda en “Una pistola para Ringo”) el vocabulario (“¡Vamos!”, “¡Adiós!”) en español,
que destaca sobre todo si se ve la película en versión original, en italiano;
pero resulta más serio (suponemos que por Michele Lupo) que el de la película
de Tessari, que está rozando la parodia.
Otro dato a tener
en cuenta es el encuentro de Arizona con Gordon cuando el primero se presenta
ante él y sus hombres para negociar la cabeza de Klay (Pazzafini). La escena
recuerda a cuando Ted Barnett (Giuliano en “Los largos días de la venganza”,
Florestano Vancini, 1967) intenta mercadear, también él solo, con el bandido
mexicano de turno y toda su panda. En las dos ocasiones terminan atizándole.
Recordemos que “Los largos días de la venganza” lleva somo subtítulo Facciadangelo (Cara de Ángel). Posiblemente
de esa película se iba a encargar Duccio Tessari, lo que cuadraría con que el
jefe de los mexicans en “Los
largos...” actúe de manera parecida y tenga un físico semejante a Fernando Sancho, aunque sin la gracia de
éste.
Como se ha visto
más arriba, Nello Pazzafini, habitual secundario en los westerns hispano-italianos,
tiene un papel importante en la trama. Asimismo, podemos disfrutar de la
presencia del entrañable Roberto Camardiel, que aparecería también en la
secuela “Arizona Colt Returns” (Sergio Martino, 1970) con el mismo papel de
Doble Whisky, y acompañando ya no a Giuliano Gemma, sino a Anthony Steffen; de
la bella Rosalba Neri (que participaría también en la mentada secuela), José
Manuel Martín, otro rostro conocido del eurowestern, Andrea Bosic y la francesa
(y algo gélida) Corinne Marchand, la protagonista femenina.
Momentos a
recordar del film serían el salto acróbata de Giuliano desde un árbol, la banda
mexicana en tropel galopando por las gargantas de Almería, que es un
espectáculo, y el duelo final entre ataúdes de Arizona y Gordon.
El guión es de Ernesto
Gastaldi (“I giorni dell’ira) y de Luciano Martino y la música, otro elemento
fundamental de la película, es de Francesco De Masi, notable compositor del
West europeo. El tema principal está cantado por Raoul. La banda sonora, en
general, es dulce y melodiosa, francamente bella.
ARIZONA COLT LYRICS
ResponderEliminarMan from Nowhere – USA (1966)
Música de Francesco De Masi
Letra: Audrey Nohra Stainton
Interprete: Raoul LoVecchio
Man from Nowhere
He came out of nowhere
with no one beside him
He rode out of the sunrise
All alone.
A man out of nowhere
with no one to love him
His one faithful companion
was his gun
No one could say just where he came from
No one could say where he was going
Was he a man without a heart?
A man with a heart made of stone?
The moon over the mountains
a skyful of starlight
and some where a young stranger pulled his way
No one could say, just where he had came from
No one could say, where he was going.
As he had come, he rode away
A man with a gun all alone
A man with a gun all alone
Um belo trabalho de pesquisa e um grande acervo invejável e único de Giuliano Gemma.
Parabéns por mais esta deliciosa postagem para os fãs de Ringo, digo Arizona!
Estaba buscando la letra de esta canción. Difícil de encontrar. Gracias
Eliminar¡¡Muchas gracias, Edelzio!! Obrigada!!
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